Elecciones

Con este comentario dejaré el tema de la política un poco aparcao y ya no os daré la tabarra con esto, el pasado 5 de Julio finalmente hubo elecciones y por primera vez acudí a votar en México.

Las casillas iban a estar abiertas de 8 de la mañana a 6 de la tarde, como se que a algunas personas les gusta agolparse a primera hora y otras a última, decidí ir alrededor del mediodía cuando la gente ande comiendo. Así que a la una de la tarde me fui pal colegio que queda a unos 5 minutos en coche desde mi casa.

En la puerta venía anunciado la casilla de la que se trata (la de la foto es de otra cuya imagen tomé hace unos días, pa despistar al enemigo). Al entrar al colegio una chica muy simpática nos preguntaba a cada uno que llegaba cual era la primera letra del apellido, y con ello nos mandaba a una u otra aula, pues así separaron el asunto para hacerlo mas fluido.

No tuve que hacer fila ni nada, entré directamente al aula. Al entrar había un montón de gente sentados en mesas y sillas pegados a las paredes cual si fuera una plaza de toros, esto resultaba intimidante, porque eso de ir a hacerlo por primera vez y que tengas mas de una docena de pares de ojos clavados en ti, como que acojona un poco y claro, uno se arruga y no cumple en condiciones.

Total, que me acerco al tío que estaba a un lado de la puerta y le doy mi credensial para votar, el tío miró mi nombre y lo dijo en alto pa que todos lo oigan (jo, hasta me sentí importante, solo faltaba que el tío hubiera dao tres golpes con un palo en el suelo), le pasó mi credensial a una chica sentada a un lado suyo, esta la buscó en un librito donde se veían en cada hoja unas copias en reducido de varias credensiales, supongo serán de los que nos tocaba en esa casilla. Al encontrarla le puso en un cuadrico al lado de la copia, un sellico con la leyenda "vota", y dio luz verde a la siguiente persona que me entregó tres hojas con los logotipos de los distintos partidos.

En las tres hojas venía el logo de cada partido y a un lado el nombre del candidato por quien podía votar y debajo su suplente. Cada boleta era de diferente color por la parte de atrás para diferenciar la que era para votar por el alcalde, el gobernador y el diputado local (como si del de la comunidad autónoma se tratara pa que me entendáis).

Con las boletas en la mano me fui a un cuchitril en medio del aula con una mesica, tres paredes y una cortinica, todo de plástico ecológico deshechable. Adentro del cuchitril no te veía ni san Pedro pues estabas tapao por todos lados, hasta por arriba, y en la pared de enfrente se leía, "tu voto es libre y secreto" la mesica estaba medio kilikolo, así que no podía apoyarme mucho porque se caía tol templete, ahí lo que debía hacer en mi media soledad (porque se sentían las miradas penetrantes de los que estaban afuera del templetillo ese) era tachar el logotipo del partido por el que yo quisiera votar, me llevé la cámara para haceros unas foticos a la boleta pero la tenia en el bolsillo del pantalón, y el cuchitril ese solo cubría de cintura p´arriba, así que no me atreví a sacar la cámara no me vayan a acusar de alguna barrabasada y termine en el trullo.
Lo que si puedo deciros es que en la parte superior indicaba el número de casilla, distrito y demás información relevante, algo que me llamó la atención es que en la parte de abajo venía un renglón donde tu podías poner el nombre de una persona que tu quisieras y que no estaba en la lista de partidos, vamos, que si alguien quiere puede votar por el mexiñol.

Ya con las boletas marcadas sales del cuchitril y la metes en unas urnas de plástico como el que se usa pa las pastas de las carpetas, Cadsa urna tenía el color del papelico, pa que no te equivoques, con cuatro ventanas transparentes (una por lado), supongo que pa que se vea que cae adentro la boleta y no se desvía por una trampilla secreta a un compartimento y que por otro lao entre otra... ya estoy desvariando... Las urnas estas estaban perfectamente ubicadas sobre unas sillas de mala manera y que no puedes mover mucho no se vayan a caer tol tinglao.

Después vuelvo con un cuarto individuo que me hace un agujerico en la credensial mientras otro me embadurna el dedo gordo de la mano izquierda con una tinta indeleble, esto es con la idea de que si tengo dos o tres credensiales no me vaya a querer pasar de listo e irme a votar a otro colegio.

Seguidamente pasan la credensial a otros dos tipejos que me entregan una boleta mas y se repite tol proceso para votar a los diputaos federales (vamos, como si serían los del congreso de madrit), me embadurnan al final el dedo derecho también y me devuelven mi credensial.

Todo el proceso no se llevó ni cinco minutos, después en la noche dieron los resultados y el que ganó, como suele ser habitual en este tipo de contiendas, es el abstencionismo. En España se echan las manos a la cabeza cuando vota menos del 60% de la gente (salvo en las europeas que solo votan los parientes de los que ocuparán las poltronas), en México los políticos están felices porque consiguieron animar a que vote el 45% de las personas censadas, así pues el gobernador, que ganó con el 48% de los votos, en realidad ganó gracias al votó del 20% del electorado.

Para celebrar la jornada democrática... bueno, no, la verdad es que se me antojó, nos echamos una carnita asada, lo malo es que a pesar de los 40 grados que tuvimos en ese día no pudimos acompañarla de cerveza porque a causa de las elecciones teníamos ley seca todo el sábado y domingo y a mi se me había olvidao comprarlas.